domingo, 27 de febrero de 2011

Queque de fresa



 En este barrio del mundo siempre hemos tenido cara de cruce de caminos, y lo digo por haber sido y continuar siendo la puerta de la nación hacia una parte de África y por supuesto de America (tanto Norte como Sur). Quizás eso, junto con la "insularidad" (que confiere un carácter muy particular), ha creado al Canario tal y como es. Y una de las cosas que mas nos caracteriza es nuestra forma de hablar. Para comenzar tenemos cientos de palabras que derivan de otros idiomas, fundamentalmente del Inglés y del Portugués, e incluso quedan unas cuantas que tienen origen en los primeros pobladores de las islas. Así por ejemplo, un cubo es un "balde", un embudo es un "fonil", la vajilla es la "loza", y así un larguísimo etcétera. La cosa se vuelve apasionante si tenemos en cuenta que hay palabras que son derivaciones de términos ingleses, como por ejemplo, el cuchillo tradicional canario se llama "naife" del ingles "knife", o tipos especiales de papa, como la "kinegua" (King Edduard) o la "autudate" ("Out to date").

 Alguno se preguntará que tiene que ver todo esto con la receta... Pues bueno, tiene su explicación. Por aquí se llama al "Cake" británico "queque", y tan agusto que nos quedamos.

 Por cierto, que se me olvidaba, el artífice de esta receta ha sido R., quien se puso manos a la obra y cocinó este queque que estaba tremendo.

 Ahí va la receta



QUEQUE DE FRESA

Ingredientes:
  • 1 yogurt de fresa (o en su defecto de frutas del bosque).
  • 3 huevos de tamaño medio.
  • 1 vaso (de yogurt) de aceite de girasol.
  • 2 vasos (de yogurt) de azucar.
  • 3 vasos (de yogurt) de harina.
  • 2 cucharaditas de levadura química.
  • 2 cucharadas de mermelada de fresa (o en su defecto de frutas del bosque).


Elaboración:

 Precalentamos el horno a 180º.

 Cascamos los huevos en un bol y batimos un minuto. Incorporamos a la mezcla el yogurt e integramos. Agregamos el azucar y el aceite y volvemos a batir. Añadimos las dos cucharadas de mermelada de fresa. Por último, mezclamos la levadura química y la harina y tamizamos sobre el bol, revolviendo hasta integrar toda la harina.



 Preparamos el molde. En mi caso un molde rectangular. Engrasamos el fondo y las paredes (con mantequilla o aceite) y un poco de harina. Movemos el molde para que toda la superficie engrasada se impregne de harina, evitando así que el queque se pegue al molde. Una vez hecho esto, retiramos el sobrante de harina, y volcamos el preparado en el molde. Una vez tengamos el preparado en el moldelo llevamos al horno aproximadamente 45 minutos a 180º.



 Fuente: El queque de mi abuela tuneado.

 Veredicto: Este queque nunca falla. El tradiciónal 3, 2 y 1 es sencillo y queda siempre jugoso. El añadido de la fresa es un acierto, pues le da un sabor distinto y muy apetecible. Seguro que lo hago otro día.


martes, 22 de febrero de 2011

Tarta de vainilla y crema de mantequilla y caramelo.



 Parece que solo cocino para fiestas, y que tengo tantas, que me paso el día cocinando, pero no... la realidad no es tan entretenida... El caso es que la receta que presento hoy fue la tarta de cumpleaños de M., que es la pareja de mi compañero de trabajo y amigo, el Sr. A. Hace más de un año, cuando llegue al trabajo, le comenté al Sr. A. que había hecho para mi Sr. Padre una tarta de cumpleaños estupenda. Entre mis explicaciones, le contaba que era una tarta Inglesa, con crema de mantequilla, y que tenía un aire a esos bizcochos que tanto le gustan a el... No se por que razón, pero se quedó totalmente fijado con esa tarta. Pasando el tiempo, cada vez que llevaba algún postre al despacho y le decía, "hoy traigo una sopresa", siempre me respondía "¿la tarta inglesa?". Finalmente, y quizás con la única intención que deje de preguntar eso cada vez que le digo que voy a cocinar algo, SE LA HE HECHO.

 Tal y como digo, se trata de una receta británica, cuyo bizcocho, un tanto firme, aunque jugoso y muy sabroso, tiene muchísimo que ver con las tradicionales tartas de boda que se cocinaban por aquellas tierras en siglos pasados (también por aquí, no crean). Su origen es un poco oscuro, fundamentalmente porque cuando conseguí la receta no tenía por costumbre apuntar la fuente (ni se me habría pasado por la cabeza que algún día tendría un blog). Es una tarta especial, que además requiere unas cuantas horas de cocina... desde luego, puedo decir que no es de las más rápidas que he hecho...

 Por su complejidad, me dieron las tantas para hacer las fotos, y claro, han quedado, como han quedado... Pero la receta es tan estupenda, que no voy a privarles de ella... En cuanto al corte,  ¡IRMINA, LO SIENTO! Era para un cumpleaños y no voy a aparecer yo allí con un cacho de menos... jejejejeje

 Ahí va la receta,

TARTA DE VAINILLA Y CREMA DE MANTEQUILLA Y CARAMELO



Ingredientes para el bizcocho:
  • 340 gr de mantequilla sin sal.
  • 375 gr de azúcar.
  • 2 huevos.
  • 4 yemas de huevo.
  • 300 gr de azúcar.
  • 315 ml de leche .
  • 3 cucharaditas de polvo de hornear.
  • 1 cucharadita de sal.
  • 1 vaina de vainilla.
Ingredientes para el ganache de chocolate:
  • 225 gr de chocolate negro.
  • 1/2 taza de nata
Ingredientes para la crema de caramelo :
  • 225 gr de azúcar.
  • 1/2 taza de nata.
  • 170 gr de azúcar
  • 4 huevos grandes.
  • 340 gr de mantequilla sin sal.


Elaboración del bizcocho:

 En primer lugar abrimos la vaina y separamos las semillas. Para aquellos que no usen vaina, pues pueden usar extracto de vainilla.

 Ponemos la mantequilla y la vainilla en una sartén. Encendemos el fuego a medio-fuerte  y cocemos la mantequilla hasta que adquiera un tono marron y desprenda un olor como a nuez. Es importante remover la mantequilla para que se nos tueste por igual, y cuando comience a tomar color no perderde el ojo, porque se puede quemar muy rápido. Una vez tengamos el tono marrón deseado, apartamos la sartén del fuego y vertemos la mantequilla derretida en un bol para que enfríe hata que se solidifique.

 Una vez solidificada la mantequilla, encendemos el horno a 180ºC. Con una batidora comenzamos a trabajar la mantequilla hasta que esté cremosa. Una vez tenga ese punto cremoso, le añadimos el azúcar y continuamos batiendo hasta que montemos la mantequilla. Este paso nos puede llevar unos cuantos minutos. Una vez esté montada la mantequilla, agregamos los huevos y las yemas de uno en uno, asegurándonos que se ha incoporado bien a la mezcla antes de agregar el siguiente.

 
 Mezclamos la harina, los polvos de hornear y la sal en un recipiente.

 Con la batidora a velocidad baja, vamos  agregando la harina y la leche a temperatura ambiente, de tal manera, que la incorporemos la primera de cinco veces, y la segunda de cuatro veces, comenzando y terminando por la harina (esto es, 1/5 harina, 1/4 leche, 1/5 harina, 1/4 leche, 1/5 harina, 1/4 leche, 1/5 harina, 1/4 leche y 1/5 de harina).

 Una vez esté todo incorporado, vertemos la mezcla en dos moldes de tarta de idéntico tamaño y los llevamos al horno a 180ºC de 35 a 40 minutos. Una vez transcurrido el tiempo, comprobaremos con un cuchillo o aguja que el bizcocho está completamente hecho. Desmoldamos y dejamos enfriar los dos discos de bizcocho.   

Elaboración del ganache de chocolate:

 Calentamos la nata en el microondas o en un cazo hasta que adquiera temperatura.

 Colocamos el chocolate troceado finamente (se puede usar también chocolate con leche en vez de chocolate negro si queremos que la tarta tenga un sabor menos fuerte) y vertemos sobre el chocolate la nata. Removemos hasta que se disuelva el chocolate.

 Llevamos a la nevera 1 hora.

 Una vez enfriada la mezcla, con la batidora mezclaremos hasta que esté ligero y esponjoso.

Elaboración de la crema de mantequilla y caramelo:

 Ponemos los 225 gr de azúcar en una sartén y mojamos con un poco de agua hasta que tenga la consistencia de la arena mojada. Cocinamos a temperatura baja hasta que el azúcar se disuelva, momento en el cual, subimos la temperatura y cocinamos hasta que adquiera un tono dorado y retiramos del fuego.

 Calentamos la nata en el microondas unos 30 segundos, y sin dejar de batirla, le incorporamos el caramelo, dejándolo caer en forma de hilo (no un chorretón, que la liamos). Si al final se nos queda la nata llena de trocitos de caramelo (lo cual es bastante probable), podemos calentar la nata en el microondas y removemos hasta disolver por completo todo el caramelo. Dejamos enfriar.

 Mientras mezclamos los 170 gr de azúcar y los huevos en un bol de metal. Ponemos el bol al baño maría y batimos la mezcla hasta que el azúcar se haya disuelto y quede suave y brillante. Cotinuamos batiendo hasta que la mezcla adquiera 70ºC (no nos pasemos demasiado o el huevo cuajará y la mezcla no servirá). Quitamos del fuego y pasamos a otro bol, y continuamos mezclando unos 5 a 10 minutos hasta que se haya enfriado un poco.

 Una vez transcurrido este tiempo, contiuamos batiendo y le vamos incorporando la mantequilla a temperatura ambiente en pequeños trocitos. Debemos añadir la mantequilla muy poco a poco o se nos cortará. Una vez hayamos incorporado toda la mantequilla, subimos la velocidad de la batidora a media-alta y batimos de 8 a 10 minutos.

 Comprobamos que el caramelo continúa en estado líquido, y sin dejar de batir la crema de mantequilla, vamos incorporando el caramelo. Una vez esté todo agregado, llevamos la crema de mantequilla y caramelo a la nevera, poniéndole film transparente pegado a la superficie de la crema para que no se oscurezca.

 Montaje de la tarta:

 Colocamos un disco como base. Extendemos sobre el disco el ganache. Podmeos incorporarlo todo o reservar una cierta cantidad para decorar (en mi caso, no reservé nada).

 Ponemos encima el otro disco y extendemos por los lados y por encima la crema de mantequilla y caramelo. Podemos hacerlo con una espátula o usar una manga pastelera y darle el acabado que más nos guste (eso va según el criterio de cada uno).

 Llevamos a la nevera y la dejamos enfriar un par de horas.



 Fuente: Misterio... vaya Vd. a saber.

 Veredicto: Una tarta deliciosa. Tiene un bizcocho de sabor intenso y firme, y un regusto a esas tartas que hacían nuestros antepasados con menos teconolgía y desde luego, mas tiempo libre. En cuanto al ganaché y la crema de mantequilla y caramelo, sencillamente deliciosas. Diría que es una tarta para repetir, pero creo que esta es la segunda vez que la hago... Me encanta.

sábado, 19 de febrero de 2011

Bundt Cake de naranja y vainilla



 Aunque este fin de semana no he tenido fiesta familiar de R., la de la semana pasada sigue coleando. De hecho, en ese "asadero" en casa del Sr. "A", novio de la Sra. "O", tuvimos ocasión de recolectar unas naranjas estupendas que de seguro se transformarán en breve en un postre la mar de lucido.    

 Y como lo prometido es deuda, aquí va otra de las recetas que pude llevar a la fiesta familiar de R.  Se trata de un Bundt Cake que encontré en el maravilloso blog de Ingrid, llamado mylovelyfood (http://mylovelyfood.blogspot.com/). Del blog de Ingrid se pueden decir muchísimas cosas, pero es que no voy a ser nada original... lo que si diré es que todo el es vibrante y cálido, desde los textos, hasta las fotos y pasando por las recetas.

 En cuanto a la receta que hoy nos ocupa, tengo que confersar que captó de inmediato mi atención, y no será porque no hemos visto bundt cakes estas últimas semanas, ya que pululaba por ahí un reto culinario. La verdad es las fotografías y los ingredientes del cake terminaron por convencerme de probar la receta. Solo he omitido una cosa, y es que opté por no hacer el icing que venía en la receta original. En cualquier caso, si quieres seguir la receta original, aquí dejo el link: http://mylovelyfood.blogspot.com/2011/02/orange-and-vanilla-scented-bundt-cake.html

 Pues lo dicho, ahí va la receta.

BUNDT CAKE DE NARANJA Y VAINILLA



Ingredientes:
  • 450 gr de harina.
  • 3/4 cucharadita de sal.
  • 1/2 cucharadita de bicarbonato.
  • 380 gr de azúcar.
  • 1 vaina de vainilla.
  • 170 gr de mantequilla sin sal.
  • 3 huevos.
  • 165 ml de zumo de naranja natural.
  • 165 ml de buttermilk (o 160 ml de leche mas 5 ml de zumo de limón.
  • Ralladura de 1 naranja.
Ingredientes para la glasa:
  • 125 ml de zumo de naranja natural.
  • 2 cucharadas de azúcar.
  • 2 cucharadas de mantequilla sin sal.



Elaboración:

 En primer lugar, precalentamos el horno a 190º y preparamos el molde que vayamos a usar, untándolo con aceite de girasol con un pincel. 

 Mezclamos la harina, la sal y el bicarbonato en un reciente.

 Aparte, y con una batidora, mezclamos el azúcar con la cáscara de naranja. Abrimos  la vaina de vainilla con un cuchillo afilado, y rascamos las semillas de interior agregándola a la mezcla anterior (o bien añadimos el extracto de vainilla a la mezcla de ralladura de naranja y azúcar). Agregamos la mantequilla, que ha de estar a temperatura ambiente, y batimos hasta que obtengamos una mezcla suave y clara. Incorporamos los huevos uno a uno, asegurándonos de que se haya mezclado perfectamente antes de agregar sel siguiente. Incorporamos el zumo de naranja. Llegados a este punto, vamos a verter sobre la mezcla la harina y buttermilk (o la leche junto con el limón), siguiendo la siguiente pauta, 1/3 de harina, 1/2 buttermilk, 1/3 de harina, 1/2 de buttermilk y finalizamos con 1/3 de harina (es decir, comenzamos y terminamos con la harina). Vertemos la mezcla en el molde. 



 Tal y como he podido aprender de la receta original, es imprescindible cocinar el bundt cake sobre una rejilla (no sobre placa). Lo introducimos en el horno unos 50 minutos a 190º, o hasta que supere la prueba del cuchillo (o palillo). 

 Mientras se va cocinando nuestro bundt cake, nos ponemos manos a la obra con la glasa. Vertemos el zumo de naranja natural en un cazo, y lo llevamos a ebullición junto con el azúcar y la mantequilla. Dejamos que se reduzca a la mitad, lo cual nos llevará aproximadamente unos 5 minutos.

 Una vez saquemos el bundt cake del horno, pincelamos la superficie vista con la glasa y lo dejaremos reposar 10 minutos. Transcurridos 10 minutos de reloj (al parecer tienen que ser exactos), le damos la vuelta y lo desmoldamos. Pintaremos nuevamente el cake con la glasa, y lo dejaremos enfriar completamente.



Fuente: Imagino que casi todos los que nos movemos por la blogosfera culinaria conocerán al blog "mylovelyfood" de Ingrid. Para quien no lo conozca, estoy encantado de invitarle a que lo descubra y disfrute de sus recetas y de sus preciosas fotografías. El LInk de la receta es: http://mylovelyfood.blogspot.com/2011/02/orange-and-vanilla-scented-bundt-cake.html

Veredicto: Cocinar este bundt cake ha sido todo un deleite para los sentidos. Se trata de un bizcocho que desprende unos olores intesos y embriagadores. Tiene además el encanto de un cake de toda la vida, pero con una gracia especial. Altamente recomendable. Repetiré esta receta en múltiples variantes.

 

martes, 15 de febrero de 2011

Brioche con pepitas de chocolate



 El día 6 de enero llegó a casa la K.A. (siento ser taaaaaan pesado), y desde entonces, llevaba yo aguantándome las ganas de hacer una ¡BRIOCHE! R. me dice que soy un plomo (y tendrá razón, claro), que siempre estoy publicando bollería y que tengo muchísimas recetas estupendas que esperan ver la luz, pero es que me gusta tantítimo hacerlos... es como un vicio... eso de estar en la cocina con la masa y harina hasta en las pestañas... en fin, que me lo paso estupendamente haciéndolos. Finalmente, y obviando el sabio consejo de R. (disculpas de antemano), me decidí a usar a mi magnífica, maravillosa, nunca suficientemente ponderada K.A. para amasar una brioche... Hasta ahora, la K.A., se ha dedicado a hacer distintos tipos de pan y panecillos, y un pan de molde inglés que es sencillamente delicioso.

 En fin, que me pierdo... Como decía... Tratándose de brioches, irremediablemente tenía que pasar... He vuelto a caer rendido ante la brioche de la Sra. Child. En este caso, y con ocasión de una fiesta familiar de R. (estoy seguro que si se ponen sabrían organizar una Boda Real (o Imperial) en un momentito), me decidí mezclar la brioche y el chocolate... y también cociné algunas otras cosas, que ya publicaré en futuros post.

 Para sintetizar un poco, solo tengo que añadir que ha quedado como siempre, delicioso, irresistible, con una textura y una esponjosidad envidiables... y es que la receta no falla.

 Ahí va la receta (aunque sea reiterativo, lo vuelvo a explicar).


BRIOCHE CON PEPITAS DE CHOCOLATE



Esponja:
  • 85 gr de leche entera.
  • 20 gr de levadura fresca.
  • 1 huevo.
  • 360 gr de harina de fuerza.
Brioche:
  • 120 gr de azúcar.
  • 5 gr de sal.
  • 4 huevos.
  • 200 gr de harina de fuerza.
  • 170 gr de mantequilla.
 
 
Relleno:
  • 100 a 150 gr de chocolate (o si prefieren, pepitas de chocolate).
Brillo:
  • 1 yema de huevo.
  • 2 cucharadas de leche.
Elaboración:

 Insisto en lo dicho en posts anteriores,  es la receta de brioche de Julia Child, solo que en este caso, con chocolate en trocitos (o pepitas).
 
 De cualquier manera, repito los pasos, y quien ya los conozca, pues simplemente, se los salta...
 
 En primer lugar preparamos la esponja. Vertemos la leche templada y deshacemos en ella la levadura fresca. Mucho ojo con la temperatura de la leche, no sea que "matemos" nuestra levadura. Una vez disuelta la levadura, unimos el huevo batido y continuamos mezclando. Agregamos a la mezcla anterior unos 180 gramos de harina y trabajamos con la batidora o amasadora (con el accesorio de gancho, aquellos que lo tengan) entre 4 y 5 minutos (si es a mano, requerirá algo más de tiempo). Detenemos la batidora y espolvoreamos sobre la esponja el resto de la harina en forma de lluvia, esto es, el resto de los 180 gr restantes.
 
 
 
 Dejamos levar entre 30 y 45 minutos (dependerá de la temperatura de la habitación, en verano, evidentemente el proceso será mucho mas rápido). Para asegurarnos que está en su punto perfecto, observaremos si la harina que espolvoreamos por encima de la esponja se ha agrietado, dejando entrever la masa (también puede darse el caso que la esponja haya incorporado parte de esa harina).
 
 Continuamos el proceso añadiendo a la esponja a la esponja el azúcar (el brioche no es especialmente dulce, por lo que si se quiere, se puede agregar algo mas de azúcar), la sal, los huevos batidos y 180 (de los 200 gr) de harina. Trabajamos unos 15 o 20 minutos con la batidora o amasadora (accesorio gancho para aquellos que lo tengan). La masa resultante ha de soltarse de las paredes. Si este no es tu caso, debes agregar los 20 gr de harina que tenemos reservados (en mi caso, como de costumbre, los he tenido que añadir).
 Una vez tengamos la masa bien trabajada, comenzaremos a incorporarle la mantequilla. Para que todo salga perfecto, es muy importante que la mantequilla esté a temperatura ambiente. Iremos añadiendo la mantequilla a pequeños trocitos, y muy poco a poco, asegurándonos de no añadir mas hasta que la anterior esté totalmente incorporada. La masa ha de quedar brillante, lisa y elástica. Dejamos la masa reposar en un bol con aceite o mantequilla.
 
 
 
 Podemos levar la masa unos 2 horas o 2 horas y media, y continuar con la receta, o bien taparla con papel film y dejarla en la nevera toda la noche. Si elegimos dejarla en la nevera toda la noche, es importante no sobrepasar las 8 horas. 
 
 Si hemos optado por dejar la masa en la nevera, al día siguiente la dejamos atemperar 1 hora (lejos de corrientes de aire, o nuestra masa cogerá frio). Una vez atemperada, o tras el levado de la masa (si no hemos optado por dejarla en la nevera por la noche), la desgasificamos y la dividimos en tres partes. Incorporamos el chocolate por partes mas o menos iguales a las tres partes de la masa, y le damos forma de trenza (puedes elegir otra forma distinta, y estará igual de bueno). 
 
 Una vez que la masa tiene su forma definitiva, la djeamos levar una hora o hasta que doble su volúmen (siempre en un lugar alejado de corrientes de aire y tapado con un paño).
 
 Tras el reposo y el levado, pintamos el brioche con la yema de huevo mezclada con las dos cucharadas de leche. Introducimos la brioche en el horno precalentado a 180º, función ventilador y calor arriba y abajo, los horneamos entre 25 a 30 minutos. Como siempre hemos de tener muchísimo ojo con el tiempo de cocción, pues depende en cada caso del tipo de brioche, no es lo mismo hacerlos pequeños e individuales que hacer uno grande, y también depende, como no, del horno). Como siempre, si vemos que se ha dorado bastante y que terminará por quemarse la superficie, siempre podemos poner por encima un papel de aluminio, y evitaremos chamuscarlo.
 
 
 
Fuente: La masa del brioche, como no, continúa siendo la msima, la del del fantástico blog italiano "mollica di pane" (miga de pan, en Castellano), http://mollicadipane.blogspot.com/2009/02/la-brioche-di-julia-child.html.
 El chocolate, pues fue una evolución lógica...

 Veredicto: Como siempre, perfecto. Animo a todos los que piensan que es una receta complicada o difícil. Resulta muy facil de hacer y entretenido, y el resultado final, como no DELICIOSO.
 
 

miércoles, 9 de febrero de 2011

Bizcocho de canela con cobertura de chocolate con leche



 ¡FEBRERO! Puede que para el resto de la geografia nacional este mes sea un poco como los demás... pero por aquí, este mes es prácticamente el Rey. Y todo se resume en una palabra, CARNAVAL. Lo dicho, estamos en febrero y se nos vienen encima los carnavales. Imagino que salvo Cadiz (donde también hay unos carnavales excelentes), la festividad sea una cosa mas o menos curiosa, pero poco mas... En cambio, para los isleños (y ahí incluyo a todas las islas Canarias), es una fiesta muy, pero que muy especial. Es el momento del año donde todos el mundo se desmelena y se transforma en algo o alguien que no es por unas cuantas horas (además, algo bastante terapéutico, ya que cada noche puedes ser una cosa distinta)... Es decir, que el charcutero del super puede ser un día un bombero, otro un pilloto de areolínea, o una "señorita de compañía" bastante fea y con unos conocimientos nulos sobre el maquillaje y su aplicación... o tu vecina pueder ser una vampiresa que bebe cerveza a morro en vez de sangre y que termina de amanecida en el parque Santa Catalina sin arder como debiera... y un largo pero larguísimo etc. 

 Luego estan los festejos menos populares y mas mediáticos, como la Gala de la Reina y por supuesto, y como no, el mayor espectáculo de los Carnavales de mi Ciudad, la GALA de elección de la DRAG QUEEN del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria, con ese despliegue de plataformas, lentejuelas, y muy pero muy poquita ropa... (con la rasca que hace en ese Parque)... A los que no la puedan ver en directo, pues se tendrán que conformar con verla televisada... :P SE SIENTEEEEE.

 El caso es que espero que esta entrada anime a la gente a desenpolvar los disfraces, las pelucas y demás complementos...

 Me voy a poner nuevamente en plan "patronato de turismo" pero es que no lo puedo evitar... Asi que aquellos que no conozcan nuestros carnavales, y les pique la curiosidad, VENGAN A VISITARNOS... ;). Eso si, para que se preparen...  por aquí la mayoría de los hombres terminan vestidos de mujer (algunas muy, pero que muy peludas y hombrunas) y pueden ir vestid@s de señoritas de dudosa reputación ...  (te puedes partir de risa).

 Volviendo a la cocina, que me pierdo con los Carnavales... En esta ocasión, un bizcocho de canela con cobertura de chocolate con leche que fue todo un descubrimiento. Lo cierto es que no le había ni prestado atención, y que fue R. el que propuso hacerlo. Fíjate por donde y como casi siempre, tenía toda la razón... DELICIOSO.

Ahí va la receta:

BIZCOCHO DE CANELA CON COBERTURA DE CHOCOLATE CON LECHE



Ingredientes para el bizcocho:
  • 250 gr de harina.
  • 250 gr de azúcar.
  • 250 ml de leche entera.
  • 125 gr de mantequilla.
  • 1 cucharada de canela en polvo.
  • 1 sobrecito de levadura en polvo.
  • 2 huevos.
  • 1 pizca de sal.
Ingredientes para la cobertura:
  • 100 gr de chocolate con leche.
  • 30 ml de nata.


 Elaboración:

 En primer lugar precalentamos el horno a 180ºC.

 Comenzamos tamizando la harina (en mi caso usé harina normal), la levadura y la canela en un bol. A esta mezcla le añadimos el azúcar.

 Aparte batimos los huevos y la leche con la pizca de sal, y los incorporamos a la mezcla de harina, batiendo hasta formar una masa homogénea.

 Derretimos la mantequilla y la añadimos a la masa. Lo vertemos en el molde de nuestra elección (engrasado y enharinado).



 Llevamos al horno a 180ºC unos 30 minutos. Dejamos enfriar antes de desmoldar para evitar accidentes desagradables.

 Montamos la nata. Aparte, derretimos el chocolate troceado en el microondas (si alguien prefiere hacerlo al baño maría, pues adelante). En mi caso y dado que mi microondas es viejo como el mundo y se "pasa" de potencia, lo voy controlando cada 20 o 30 segundos (es fundamental evitar que el chocolate se queme). Dejamos que el chocolate se enfrie para incorporarlo a la nata, o la nata se licuará. Dejamos reposar un poco para que tome cuerpo.

 Una vez desmoldado el bizcocho, y cortado de la manera que prefieran, pasamos a recubrirlo con la cobertura. Dejaremos endurecer la cobertura, y pasaremos a espolvorear con la canela. En mi caso, en vez de espolvorear con canela, me decidí por el azucar glas, pero todo es cuestión de gustos.



 Fuente: Libro "Chocolate, pensamientos, palabras e ideas golosas", de la Editorial Desiderata.

 Veredicto: Un postre la mar de apañado. Se trata de algo que puedes hacer en un momento y que es delicioso. Además, como buena receta de bizcocho, admite múltiples variantes, se me ocurre cambiar la cobertura de chocolate por crema de dulce de leche, añadir al bizcocho frutos secos, etc... el límite la imaginación y la línea.

martes, 1 de febrero de 2011

Donuts.



 Tener un blog llamado "chocolat republic", que además únicamente publica recetas de postres, no resulta muy compatible con estar a dieta. Y digo esto porque llevo ya unas cuantas semanas en semejante situación... claro que estando como estoy algo zumbado, tampoco es algo de lo que preocuparse. El caso es que tocaba ya una puesta a punto y perder todo ese lastre que termina por dejarnos hechos puré al final del día. No obstante, que no cunda el pánico, ya que se da la extraña paradoja que disfruto muchísimo más cocinando postres que comiéndolos (que hay que reconocer que tampoco está nada mal eso de comérselos). Así pues, y aún estando a dieta, seguiré cocinando y publicando puntualmente.

 En cuanto a la receta de hoy, es una de esas pobres huérfanas que no tiene autor reconocido... mil y una disculpas... el caso es que llegó a mi hará como hace unos ocho o nueve meses y por aquel entonces únicamente apuntaba la receta, sin indicar que persona, revista, libro, blog o página web de origen (cosa que desde luego no me pasa ahora). De cualquier manera, reitero nuevamente las disculpas.

 Esta es la segunda vez que hago donuts en casa. Ya la primera vez me pareció una receta super sencilla y muy resultona, y en esta ocasión, me reitero en lo dicho. Imagino que casi todos ya los habrán hecho en casa, pero si por casualidad eres una o uno de esos pocos que aún no se han puesto manos a la obra, pues te animo... IMPRESCINDIBLE para una tarde de merienda con amigos...

 Ahí dejo la receta.

DONUTS


Ingredientes de los donuts:
  • 80 gr. de mantequilla.
  • 40 gr. de levadura fresca.
  • 1/4 cucharada de sal.
  • 2 huevos.
  • 1 y 1/2 cucharadita de extracto de vainilla (o 1 vaina).
  • 300 cl. de agua tibia.
  • 100 gr. de azúcar.
  • 750 gr. de harina de fuerza.
  • Aceite de girasol para freir.
Ingredientes para el almíbar de naranja:
  • Ralladura de 1 naranja grande.
  • 100 ml. de agua.
  • 200 gr. de azúcar.
Elaboración:

 Disolvemos la levadura en el agua tibia, tras lo cual, agregamos el azúcar.

 Batimos huevos en un bol y le añadimos la mezcla de levadura, así como el extracto de vainilla (o las semillas de vainilla). Incorporamos la leche sin dejar de remover.

 Vamos agregando la harina de fuerza a los líquidos poco a poco (yo lo hago de cuatro veces), asegurándonos que queda bien integrada antes de continuar. Agregamos a la masa la mantequilla cortada en trocitos poco a poco (nos aseguramos que queda bien incorporada).



 Tras esto, podemos amasar a máquina (si tenemos, evidentemente) o a mano. A mano serán suficientes unos 8 o 10 minutos, asegurándonos de no agregar demasiada harina a la mesa.

 Dejamos reposar la masa 1 hora o hasta que haya doblado su volúmen. Colocamos la masa sobre la superficie de trabajo y desgasificamos. Extendemos la masa con un grosor de 1.5 centímetros y cortamos con el molde al tamaño deseado. Aquí un poco de mesura, puesto que si nos dejamos llevar por el entusiasmo, saldrán unos donuts ENORMES. Tras cortar los donuts, los dejamos levar por espacio de 45 minutos aproximadamente.

 Ponemos un cazo al fuego con aceite (lo prefiero a hacerlos en sartén, puesto que de uno en uno, no solo se ahorra en aceite, sino que además lo controlamos mejor) y los freimos hasta que estén dorados. En cuanto a la temperatura, no demasiado elevada, ya que queremos que se cocinen bien por dentro.

 Una vez fritos, se les deja secar sobre papel absorvente, eliminando así el exceso de grasa.

 En un cazo, llevamos al fuego la ralladura de naranja, el azúcar y el agua. Debe quedar un almíbar ligero pero con un color entre amarillo y ambar (delicioso).

 Podemos ponerles como alternativa al almíbar de naranja, azucar, una glasa con el colorante que mas nos guste, chocolate blanco, chocolate negro. De cualquier manera quedarán deliciosos.




 Veredicto: Excelentes, sencillamente apetecibles en una tarde de reunión con amigos o en un cumpleaños, o algo especial (mejor que sea en mucha compañía, ya que con la receta salen unos cuantos).
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